La red Wi-Fi se puede utilizar para contar la cantidad de personas en una habitación.
El método permitirá rastrear la cantidad de visitantes en los establecimientos para contener la propagación del coronavirus.
Investigadores de la Universidad de California en Santa Bárbara, dirigidos por Yasamin Mostofi, han encontrado una forma de utilizar una red Wi-Fi normal como herramienta para contar la cantidad de personas en un espacio determinado.
Herramientas como esta ya existen y permiten que lugares como aeropuertos y centros comerciales rastreen a los visitantes y el flujo de personas a través de los edificios. Pero dependen de equipos especializados, como cámaras de video y tecnologías sofisticadas de reconocimiento de imágenes, o de cómo las redes inalámbricas interactúan con los dispositivos electrónicos de las personas, ya que los dispositivos buscan constantemente conectividad Wi-Fi.
En 2015, otro grupo de investigadores dirigido por Mostofi demostró cómo se pueden usar equipos Wi-Fi estándar para contar la cantidad de personas en un grupo sin la necesidad de ningún equipo adicional. Pero la técnica demostrada tenía una limitación importante. Ella requirió que todas estas personas caminaran en un área específica, creando interrupciones mensurables en la señal de Wi-Fi.
Ahora Mostofi y su equipo han demostrado una nueva técnica que puede contar incluso a personas inmóviles mediante el análisis de pequeños movimientos inconscientes. Al igual que con el método anterior, el transmisor y el receptor de Wi-Fi se colocan a ambos lados de un espacio lleno de personas sentadas o paradas, y midiendo y rastreando pequeñas fluctuaciones en la intensidad de la señal de Wi-Fi, períodos de alta y baja actividad en una habitación, puede determinar el número de los presentes.
Pero los datos recopilados del receptor Wi-Fi no están completos. Si cinco personas en una habitación de cada 10 están inquietas al mismo tiempo, los datos simplemente muestran un llamado «período agitado de la multitud» (los períodos de inactividad se denominan en cambio «silencio de la multitud») sin proporcionar información real sobre cuántas personas están realmente en movimiento. Para calcular la plantilla, los investigadores tuvieron que desarrollar un nuevo modelo matemático utilizando la teoría de las colas.
Después de probar la nueva tecnología para contar personas que usan Wi-Fi en 47 experimentos, la precisión resultó ser muy alta: el 96,3% del tiempo, la cantidad estimada de personas sentadas en el espacio fue precisa o se desvió en uno. La precisión se redujo al 90% cuando las señales de Wi-Fi atravesaron las paredes.
La capacidad de contar con precisión la cantidad de personas en un espacio puede ser útil en varios casos, por ejemplo, para rastrear la cantidad de visitantes en restaurantes y otros establecimientos con el fin de contener la propagación del virus. O aumentar la precisión de los sistemas inteligentes de calefacción y refrigeración, lo que permite subir o bajar la temperatura en función del número de personas en la habitación.